JOCOQUE: está repleto de microorganismos benéficos para el cuerpo como los lactobacilos, los cuales te ayudan a mantener un buen funcionamiento gastrointestinal, protegen de infecciones y ayudan a una buena digestión. Lo puedes encontrar en diferentes presentaciones, dependiendo su cantidad de agua y grasas, e incluso hay versiones sazonadas con especias o chiles que lo convierten en un excelente dip para botanas de verduras o untable para tus sándwiches.
LECHE EN POLVO DESCREMADA: Esta leche es elevada a altísimas temperaturas que eliminan el agua y dejan sólo las proteínas y nutrientes. Es sumamente útil para usarse en vez de la crema para el café y ahorrarse unas calorías, también en repostería o para usarse en casos de emergencia ya que dura mucho más en la alacena.
QUESO PANELA: además de tener un bajo contenido de grasa, es muy versátil en la cocina. Fíjate en su contenido de sal, por que si es muy procesado se modifica su textura, sabor y puede hacer que retengas líquidos.
QUESO COTTAGE BAJO EN GRASA: Excelente acompañante de las frutas lo que lo convierte en parte de un desayuno rápido y nutritivo. También se puede mezclar en omelettes o con verduras o guisados, e incluso agregar a las sopas de verduras en vez de la crema entera para darles mejor textura y sabor con muchas menos calorías.
YOGURT GRIEGO NATURAL: tiene una consistencia más espesa y cremosa que el tradicional porque está lleno de proteína, que son los nutrientes que dan forma a nuestros músculos; sabías que una porción aporta casi los mismos gramos de proteína que un pedazo de carne? Además puede sustituir a la crema o hasta el harina en varias recetas. Busca las versiones sin frutas agregadas, azúcar ni grasa en el supermercado para que realmente sea una opción saludable.
Prueba hacer estos intercambios saludables o agregarlos a tu dieta y disfruta de sus enormes beneficios!
Dra. Julia Salinas Dücker
Médico especialista en Nutrición